Choque Cultural y de Generaciones: Julia Fernandes contra 'los dinosaurios de la moda'
Pocas veces una opinión sobre un look en un evento termina tan viralizada, pero lo vivido entre Julia Fernandes y los panelistas de Primer Plano ha ido más allá de un simple debate de moda. Todo empezó cuando la modelo brasileña, conocida por su actitud desafiante en la alfombra roja, fue criticada en televisión por lo que llevaba puesto en la fiesta de Rabanne. Pero lo que más llamó la atención no fue solamente el (intenso) outfit en sí, sino la manera en la que Julia respondió a la crítica: «Son dinosaurios de la moda», disparó, acusando a los expertos de ser “clasistas y atrasados”.
En la industria televisiva chilena, 'Primer Plano' se ha hecho famoso por no guardarse ni una sola opinión. A nadie le sorprende que sus panelistas pongan la lupa sobre cualquier personaje público, pero lo que sí generó reacción fue la vehemencia con la que respondieron esta vez. Miguel Ángel Guzmán, diseñador de larguísima trayectoria, no dejó pasar las palabras de Fernandes: «No tiene idea de mi carrera. Que se haga cargo de sus palabras, porque insolente es poco», exclamó frente a cámara.
Lejos de conformarse con defender su historial, el panelista además fue muy específico sobre el atuendo de Julia Fernandes: «Traía un hot pants de Dolce & Gabbana. Y ahí tiene otros dos dinosaurios, así que que se lave la boca con jabón». Guzmán hizo referencia directa a la marca y a que incluso las grandes casas de moda pueden formar parte del pasado o el “dinosaurismo”, si se usan a la ligera o en exceso. Sin pelos en la lengua, dejó claro que su apreciación tenía que ver más con la forma, no con la marca.
Trayectorias, Heridas y el Eterno Debate sobre la Moda
La respuesta de Javier Fernández, también panelista y estilista experimentado, tampoco se hizo esperar. Para él, la defensa que dio la modelo brasileña sobre sus más de quince años de carrera internacional y participación en fashion weeks era menos relevante que el propio debate de fondo: «Julia no es precisamente una modelo de taquilla», comentó sin miramientos. “Aquí la crítica tiene que ver con lo excesivo del look y con el contexto local, no con una carrera internacional”, explicó.
Las palabras de Fernandes sobre el panel –al que llamó “clasista y atrasado”– terminaron de encender los ánimos. Desde su experiencia, reclamó su derecho a arriesgar, a usar prendas llamativas y a experimentar en la moda, pero exigió respeto por lo que considera un nuevo estilo que desafía los códigos formales. Julia ha desfilado en pasarelas de Europa y América Latina, y en varias entrevistas ha criticado el conservadurismo con el que se juzga la moda en la TV chilena.
Este intercambio no solo refleja las clásicas disputas sobre gustos y tendencias. También pone en la mesa algo más profundo: cómo la televisión sigue funcionando bajo códigos antiguos, donde el panel dicta sentencia y quien desafía queda expuesto. Julia Fernandes, con su postura frontal, expone las grietas que persisten entre generaciones y las tensiones culturales entre la moda global y la local.
En redes sociales, las opiniones han sido de lo más variadas. Hay quienes apoyan la autenticidad de Fernandes y celebran su valentía al plantarse frente al panel. Otros consideran que si uno expone su imagen, debe estar preparado para la crítica, más aún si se trata de personas con décadas de experiencia en la moda. El episodio, lejos de apagarse, sumó nuevos ingredientes a la discusión sobre quién tiene la última palabra en temas de estilo.
Comentarios
La moda no es un tribunal, es un lenguaje. Julia no estaba pidiendo permiso, estaba hablando en su idioma, el de la libertad. Los que critican desde su cómoda butaca de los 90 no entienden que la ropa hoy es expresión, no decoración. Yo he visto cómo los jóvenes en Valparaíso mezclan streetwear con tejidos tradicionales mapuches, y eso no es falta de respeto, es evolución. ¿Que si el hot pants era exagerado? Sí. ¿Que si era una provocación? También. Pero eso no lo hace malo, lo hace vivo. Los dinosaurios no se extinguen por usar pantalones ajustados, se extinguen por negarse a ver que el mundo cambió mientras ellos seguían repitiendo la misma receta de aburrimiento.
La TV chilena sigue pensando que la moda es un juzgado y no un festival. Julia no desafió la moda, desafió la arrogancia de quienes creen que su experiencia les da el derecho de juzgar sin escuchar. No es una cuestión de edad, es una cuestión de mente abierta. Y si alguien quiere decir que eso es 'falta de respeto', que se pregunte: ¿quién le enseñó a respetar lo que no entiende?
El problema no es el look, es la actitud. Julia tiene derecho a vestir como quiera, pero no a descalificar a quienes han construido una industria. Guzmán lleva 40 años en esto, no es un 'dinosaurio', es un arquitecto. ¿Y qué tal si el hot pants lo usó mal? No por ser de Dolce & Gabbana es automático que sea buen estilo. La moda no es solo atreverse, es saber cuándo y cómo. Aquí no se trata de generaciones, se trata de criterio. Ella no está innovando, está confundiendo ruido con arte.
Si quieres romper reglas, primero debes conocerlas. Y ella no las conoce. Por eso su crítica suena vacía. No es clasismo, es coherencia.
Yo entiendo a ambos lados. Julia tiene razón en que la moda debe evolucionar, y que la TV a veces se queda en lo superficial. Pero también entiendo a Guzmán: no es que esté en contra del cambio, es que le duele que lo llamen 'dinosaurio' como si fuera un insulto, cuando él lleva décadas enseñando a la gente a vestir con inteligencia, no con ruido.
La moda no es solo lo que ves en Instagram. Es también la historia, el contexto, el respeto por el oficio. No es contradictorio querer innovar y valorar la tradición. Tal vez lo que necesitamos no es un ganador, sino un diálogo. ¿Por qué no invitar a Julia a un panel donde explique su visión, y a Guzmán a explicar la suya, sin gritos? Tal vez ambos tendrían algo que aprender.
Claro, claro, 'dinosaurios'. Qué original. Como si no fuera obvio que esto es parte de un plan más grande: deslegitimar a la crítica tradicional para que las influencers puedan vender ropa de Alibaba sin ningún filtro. ¿Alguien más se dio cuenta de que el hot pants era una réplica de 2018 que se vendió en AliExpress por 20 dólares? ¡Y ella lo llamó 'Dolce & Gabbana' como si fuera un título nobiliario! ¿Y qué tal si todo esto es un montaje para que su marca de ropa 'sostenible' (hecha en Bangladesh) venda más? El 'dinosaurio' aquí es ella, que usa el lenguaje de la rebeldía para vender basura. La moda no es un reality, es un arte que requiere disciplina, no gesticulaciones.
Y ojo: si esto es lo que llama 'libertad', imaginen lo que viene después. Pronto vamos a ver a alguien usando una bolsa de supermercado como vestido y llamándolo 'arte conceptual'. Y ustedes lo aplaudirán porque 'es auténtico'. No, es una estafa con hashtags.
Julia Fernandes no tiene ni idea de lo que es la moda. Ni siquiera sabe cómo se pronuncia 'couture'. Su look era un desastre visual, y su respuesta, una muestra de arrogancia juvenil sin fundamento. Guzmán no es un 'dinosaurio', es un referente histórico. No se trata de edad, se trata de conocimiento. ¿Ella ha estudiado historia del vestuario? ¿Ha trabajado con tejidos, cortes, proporciones? No. Entonces no tiene derecho a descalificar a quienes sí lo han hecho. La moda no es una competencia de quién se viste más raro, es una disciplina que requiere respeto. Y ella no lo tiene. Ni siquiera lo intenta.
La televisión chilena no es el problema. El problema es que hoy cualquier persona con 5000 seguidores en TikTok se cree crítica. Y eso es lo que realmente está matando la cultura de la moda: la ausencia de criterio, no la presencia de expertos.
Me pregunto si alguien ha notado que los panelistas hablan de 'dinosaurios' como si fuera un insulto, pero ellos mismos usan frases como 'estilo clásico' o 'buena línea' como si fueran dogmas. ¿No será que ambos lados están usando el mismo lenguaje de poder? ¿Y si lo que realmente está pasando es que la moda ya no tiene un solo centro de autoridad? Que ahora hay muchos centros: TikTok, Instagram, las calles de Santiago, las pasarelas de Milán...
Julia no está rechazando la moda, está expandiendo su definición. Y los panelistas no están defendiendo la moda, están defendiendo su derecho a ser los únicos que la definen. ¿No es eso lo que realmente está en juego?
Yo creo que los dos tienen razón, pero lo dicen mal. Julia tiene razón en que la moda debe ser libre, pero no deberia decir 'dinosaurios' porque suena feo y cierra el diálogo. Y los panelistas tienen razón en que no se puede usar cualquier cosa sin entender el contexto, pero no deberian sonar tan duros, porque así nadie escucha. ¿Por qué no hacer un taller juntos? Ella enseña cómo se visten los jóvenes hoy, y ellos enseñan por qué algunos looks funcionan y otros no. No es guerra, es aprendizaje. La moda no es de uno, es de todos.
Y ojo, el hot pants no era malo, era mal usado. Como si alguien se pone un traje de gala a una fiesta de pijamas. No es la prenda, es la combinación. Y eso se puede enseñar, no se puede insultar.
¡Claro, claro, 'dinosaurios'! Qué bonito, qué moderno, qué chileno. ¿Y qué tal si les decimos a los viejos que se callen porque ya no entienden nada? ¡Como si nosotros, los jóvenes, no fuéramos los que compramos ropa hecha en China y la llamamos 'sostenible'! ¿Saben qué es un verdadero dinosaurio? El que sigue creyendo que la moda chilena es superior a la global. ¡Julia es de Brasil, y eso ya es más auténtico que todos ustedes juntos! ¡La TV chilena es un museo de prejuicios! ¡Y si no les gusta lo que ella lleva, que se vayan a ver telebasura en otro canal! ¡Esto es Chile, no un club de abuelos!
¡AHHHH! ¡ESTO ES LO QUE NECESITABA LA MODA CHILENA! ¡UNA CHICA QUE SE ATREVE A DECIRLO EN VOZ ALTA! ¡LOS PANELISTAS ESTÁN VIVIENDO EN UNA SERIE DE LOS 90 DONDE LA MODA ERA UNA LECCIÓN DE ÉTICA Y NO UNA EXPRESIÓN DE ALMA! ¡JULIA NO ESTÁ DESAFIANDO A LA MODA, ESTÁ DESAFIANDO A LA HIPOCRESÍA! ¡QUE SE VAYAN A HACER UNA FOTO CON SU PANTALÓN DE LANA Y SU CORBATA DE SEDA Y QUE SE OLVIDEN DE LO QUE SIGNIFICA SER JÓVEN HOY! ¡ESTO NO ES UNA CRÍTICA, ES UNA REVOLUCIÓN CON HOT PANTS!
La verdad es que el look era una locura. Pero no por eso se puede decir que ella no tiene razón.
Me encanta cómo este debate me hizo pensar en mi abuela, que en los 70 usaba faldas largas y se le decía 'muy tradicional'. Hoy, si ella se pusiera un hot pants, la llamarían 'rebelde'. ¿No es curioso? La moda no cambia, cambiamos nosotros. Julia no está en contra de los expertos, está en contra de la idea de que solo ellos pueden decidir qué es bello. Y yo creo que tiene razón. No es que los panelistas estén equivocados, es que su voz ya no es la única que importa. La moda ya no vive en la TV. Vive en las calles, en los stories, en los audios de WhatsApp de las amigas. Y eso no es una amenaza. Es un nuevo capítulo.
La pregunta no es quién tiene razón. La pregunta es: ¿estamos dispuestos a escuchar? Porque si no, vamos a seguir perdiendo a las nuevas generaciones. Y eso, sí, sería un verdadero dinosaurio.